Inician mujeres reclusas huelga de hambre en Cereso de Chilpancingo
Exigen visita conyugal dos veces por semana, que regresen las visitas normales los días sábados y domingos y que les permitan trabajar
Texto: Alberto Gómez
Fotografía: Hilda Perales
Chilpancingo de los Bravo, Gro., 01 de julio de 2024.- Más de 30 mujeres que se encuentran recluidas en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Chilpancingo, iniciaron una huelga de hambre al interior del penal para protestar y exigir reunión con autoridades penitenciarias.
Las reclusas denunciaron que existen un sin fin de demandas que no han sido antendidas por los encargados del penal, incluso, les han cortado las visitas familiares y no cuentan con trabajo para satisfacer sus necesidades económicas.
A través de una entrevista de radio, una de las inconformes acusó que las autoridades del Cereso han cortado manera arbitraria las visitas familiares a los presos.
Una de las reclusas —cuya identidad nos reservamos—, resaltó que la protesta se da ante la falta de atención y la omisión por parte de los directivos del penal y que no se trata de un motín, sino más bien de una inconformidad por la cerrazón.
«No es un motín, simplemente estamos pidiendo el derecho de audiencia con el encargado de despacho. Queremos que se nos regrese la visita conyugal dos veces por semana, que regresen las visitas normales los días sábados y domingos, que a las mujeres se les permita trabajar porque no hay dinero para poder comer», señaló una de las reclusas.
La protesta se dio al interior del Cereso, por lo que al exterior del penal no se visualiza alguna movilización.