Tardaron seis años para entregar a sus familiares el cuerpo del profesor Porfirio Barrera

Este martes por fin la FGE entregó los restos de Barrera Díaz a sus familiares de Tlapa, luego de exámenes de ADN y otros

Texto: Jorge Balvanera 

Chilpancingo de los Bravo, Gro., 21 de enero de 2025.- A seis años de su desaparición, ocurrida el siete de enero del año 2019, en la cabecera municipal de Tlapa de Comonfort, en la Montaña Alta de Guerrero, este mediodía en el Servicio Médico Forense de Chilpancingo, la Fiscalía General del Estado(FGE) entregó al Colectivo Luciérnaga, los restos de Porfirio Barrera Díaz.

Los restos de Porfirio Barrera, maestro de profesión, fueron entregados a su esposa Austreberta “N”, del Colectivo Luciérnaga, quien expresó en entrevista: “no lo puedo, creer todos esperábamos encontrarlo vivo, desafortunadamente no fue así, pero al menos la familia lo vemos regresar, no como quisiéramos, va a regresar a Tlapa, y le vamos a dar cristiana sepultura”.

Fue un proceso doloroso «desafortunadamente en Guerrero, no sé si en todo el país, hay muchos obstáculos, y muy poca ayuda, nula para este tipo de casos; vamos a las búsquedas, y nadie quiere prestar una máquina; es un desgaste muy grande; ojalá y nuestra presidenta Claudia Sheinbaum, voltee a ver a todos nosotros, que tenemos la desgracia de perder a un familiar, y ojalá haya más apoyo”.

Lamentaron que la única institución que los apoyó es (el Centro de Derechos Humanos de la Montaña) Tlachinollan, «y nos dio acompañamiento; a veces los compañeros no quieren acudir, porque o trabajas o te vas a buscar a tu familia; yo quedé con una niña, tengo un trabajo fijo, y cada vez que puedo acudo a las búsquedas; la mayoría del colectivo somos mujeres”.

Agrego: «Es un calvario venir hasta la Fiscalía, a realizar los estudios (de ADN); casi imposible, yo de este año como que ya me había desesperado, y cuando dieron la noticia, pues el momento que no lo puedo asimilar. Él desapareció el siete de enero de 2019, y lo encontraron hasta abril, del mismo año”.

Por su parte Neil Arias, abogada del Centro Tlachinollan, recordó que desde 2016, en Tlapa la violencia se incrementó “ hubo muchos casos de desaparición, y levantamientos de personas; creció mucho la inseguridad, por la presencia de un grupo criminal, que secuestraba y mataba a personas, con la complicidad de autoridades.

Puso de ejemplo el caso del luchador social Arnulfo Cerón, que desapareció el once de octubre de 2019, “a partir de ahí iniciamos las búsquedas, tanto de Arnulfo como la del maestro Porfirio, y otros desaparecidos más”.

Dijo que a la fecha “tenemos en el Colectivo Lucerna más de 50 casos de denuncias victimas de desaparición entre niñas, niños, mujeres, hombres, y gente de la tercera edad; con las búsquedas, se logró identificar a cinco personas, entre ellos una familia de cuatro integrantes: un niño, la mamá, el esposo, y el abuelo, halladas Contlalco, una colonia de Tlapa, ahí se encontró toda esa familia”.

Además dos víctimas han sido identificadas a través de los estudios que realiza la Comisión de Periciales de la FGE “se tienen de 13 a 14 casos, de mujeres desaparecidas; y menores de edad son dos, una niña de cinco años, y una de doce; una es del poblado de Atlamajac, municipio de Tlapa, en donde desaparecieron a la mamá, hija y abuela; otra familia es del municipio de Zapotitlán Tablas, en donde desaparecieron a la mamá, y su hija de doce años”.

Del caso de Austreberta “N”, a la que acompañó a recibir el cuerpo de su esposo, señaló que “es un grave problema que vemos dentro de la fiscalía, porque su esposo desapareció el siete de enero de 2019, y a raíz de la búsqueda, los restos de Porfirio los encontraron hasta el 9 de abril de 2019; en el mismo lugar se encontraron restos óseos”.

Lamentó que hayan tardado mucho tiempo en hacer mucho los estudios de ADN “nos dijeron que se debe a que intervienen la odontóloga, la antropóloga, genética forense, y solo tienen recursos para un caso, pero no para todos. En el caso de Austreberta le tomaron muestras a sus hijos, y a través de los estudios se hizo la confronta, pero en otros casos, no se hace porque viven lejos, en sus pueblos”.

La abogada de Tlachinollan aseguró que “hasta el 2024 se han encontrado 113 restos óseos, a cargo de la Fiscalía de Tlapa, y abren carpetas de investigación, pero al Colectivo Luciérnaga no le han notificado si han identificado más familiares; así paso con doña Autreberta, que tardaron seis años en comprobarlo científicamente”.

No se sabe con precisión de qué murió su familiar, ni la temporalidad, “si fue una muerte violenta, y el momento en que murió.

La necropsia dice que el murió ocho días anteriores a cuando se practicó; pero no se puede establecer que la muerte fue en abril, se piensa que fue dos o tres días después de que desapareció, solo encontraron huesos y el cráneo, su cuerpo estaba incompleto”.

Con el cuerpo del maestro Porfirio, “encontrado en un lugar conocido como Siete Cuervos, en la salida de la carretera Tlatzala a Tlapa, y había otros tres cráneos, que están sin identificar, hallados desde hace seis años”.